Ruta del Quijote: pueblos que debes seguir para hacer la ruta del famoso caballero
Si tuviéramos que escoger un personaje icónico de la literatura mundial, y con auténticas raíces españolas, elegiríamos a Don Quijote de la Mancha. Este personaje, creado por Miguel de Cervantes en el siglo XVII, no ha perdido su seña de identidad, gracias a que representa la lucha abnegada de los ideales y la justicia frente a cualquier impedimento de la razón.
Siguiendo los pasos de aquel hidalgo, más de 400 años después de su creación, se ha creado la Ruta del Quijote. En ella, se recorren todos los escenarios en los que acontecieron sus aventuras; Un trayecto que nos permite disfrutar no solo de un paseo literario, evocador y sugerente, sino también los paisajes más bonitos de España.
1. Comenzamos en Alcalá de Henares
El primer punto de nuestra ruta se encuentra en Alcalá de Henares. Esta ciudad es el lugar de nacimiento de Miguel de Cervantes, de ahí que bien merezca una visita a fondo. Además de los importantes vestigios históricos que nos ofrece, y centrándonos en el tema que nos ocupa, es necesario sacarle todo el partido a la dedicación de su vecino más ilustre.
A lo largo de toda la ciudad vamos a encontrar referencias al escritor: la Calle Mayor y su bonita Plaza Cervantes, donde podemos visitar un singular corral de comedias, pero, sin duda, el punto principal es el Museo Casa Natal de Cervantes.
Se trata de una casa típica del siglo XVI y XVII en la que vamos a viajar hasta su nacimiento e infancia. Además de conocer las estancias típicas, este centro cultural también organiza talleres y actividades relacionadas con la figura del escritor y sus insignes personajes.
Para completar la visita a Alcalá de Henares, puedes completar el recorrido visitando la Universidad, declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO y su preciosa catedral.
El siguiente paso de nuestra ruta nos lleva a Madrid, que se encuentra a poco más de 35 kilómetros por carretera y a unos 30 minutos de trayecto de Alcalá de Henares.
2. La siguiente parada es Madrid
Madrid te ofrece un gran número de planes, visitas y actividades que realizar en torno al mundo de la cultura, la historia y el ocio. Así que, si dispones de tiempo suficiente, puedes ampliar tu visita conociendo otros lugares curiosos y de interés, pero si lo que quieres es centrarte en el mundo del Quijote y de su creador, entonces tendrás que buscar aquellos que están unidos a tan magnas figuras.
El lugar más emblemático asociado con Cervantes en Madrid lo encontramos en la Iglesia y Convento de las Trinitarias. Según las crónicas históricas, allí podrían encontrarse los restos mortales del escritor y de su esposa. De hecho, se ha erigido un monumento funerario en su honor.
Otros espacios que relacionan a Madrid con Cervantes son la Sociedad Cervantina, donde se imprimió en 1605 la primera edición de la novela; la Biblioteca Nacional, donde se custodia una primera edición del Quijote; y la taberna Casa Alberto, lugar en el que Cervantes escribió la segunda parte de la novela. Sin olvidar las dos estatuas del escritor, Don Quijote y Sancho, que lucen en la Plaza de España.
La siguiente parada en nuestra ruta será Esquivias, en Toledo. La distancia es de 83 kilómetros y si viajamos en coche, la podemos recorrer en 1 hora aproximadamente.
3. Descubre el encanto de Esquivias en Toledo
Esquivias es un pintoresco municipio perteneciente a la provincia de Toledo y que guarda una importante relación con Miguel de Cervantes. Aquí nació su esposa: Catalina de Palacios, por lo que no es extraño encontrar numerosas referencias a su vecina más ilustre.
En Esquivias, también se celebró el matrimonio de Cervantes y Catalina en 1584. Todavía se conserva la casa, hoy convertida en museo, donde vivió la pareja durante algunos años, que en 1971 fue declarada Monumento Histórico-Artístico.
A tan solo media hora en coche, nos encontramos con Toledo, la ciudad monumental conocida como la de las “3 culturas”. En ella, se aglutinan espectaculares edificaciones que han sabido convivir, con todo su esplendor, a lo largo de los siglos: la catedral, mezquitas y sinagogas, fieles testigos de una historia gloriosa.
La siguiente parada la encontramos en Consuegra, a 60 kilómetros de Toledo, lo que supone algo menos de 1 hora si viajamos en coche.
4. Nos movemos a Consuegra y Alcázar de San Juan
Sin salir de la provincia de Toledo tendremos que ir a Consuegra. Cuando estemos llegando a este municipio, aparecerán en el horizonte, por sorpresa, los primeros símbolos que se relacionan con el paisaje quijotesco: los molinos de viento.
Se trata de un conjunto de 12 molinos perfectamente conservados. De entre todos ellos, destaca el conocido como “Sancho” que conserva toda la maquinaria desde el siglo XVI. No obstante, el molino “Bolero” es el único que está abierto a las visitas.
A tan solo 30 kilómetros se sitúa Alcázar de San Juan, en la provincia de Ciudad Real. Este municipio ha hecho de Cervantes su hijo predilecto, gracias a que fue bautizado en ella, concretamente en la iglesia de Santa María la Mayor.
Además de la imponente escultura que podemos disfrutar del escritor en la puerta de la Colegiata de Santa María la Mayor, también existen otras visitas relacionadas con Cervantes: un parque con su nombre, el Centro de Interpretación Cervantino y las dos estatuas de Don Quijote y Sancho en la plaza España. Muy interesante, y con el fin de sumergirse de lleno en la época, es visitar el Museo Casa del Hidalgo.
Pero lo más impactante es, sin duda, subir hasta el cerro de San Antón para disfrutar de la visita a los molinos. La siguiente parada está a menos de 15 minutos en coche, tan solo 10 kilómetros separan Alcázar de San Juan de Campo de Criptana, nuestro siguiente destino.
5. Los molinos de Campo de Criptana y El Toboso
Nuestro siguiente paso por la ruta se sitúa en la que, con toda probabilidad, sea la tierra que inspiró a Cervantes para la famosa batalla de los molinos y los gigantes, perpetrada por Don Quijote.
Desde la oficina de turismo ofrecen visitas guiadas para conocer, en vivo y en directo, los legendarios molinos. A pesar de contar con cinco siglos de historia, todavía se conservan perfectamente.
A unos 20 minutos en coche desde Campo de Criptana encontramos El Toboso, la localidad toledana donde Don Quijote encontró, o creyó encontrar, a su amada. No en vano, una de las visitas obligadas al llegar a la ciudad es la del Museo Casa de Dulcinea. Se trata de un edificio que recrea un caserón antiguo del siglo XVI. Al parecer, y según cuenta la historia, esta casa perteneció a Ana Martínez Zarco de Morales, una joven en la que se inspiró Cervantes para crear el personaje de Dulcinea.
Otra visita obligada es al Museo Cervantino, donde se encuentra un gran número de ediciones de la obra del Quijote, hasta en 70 idiomas distintos.
La siguiente visita de la Ruta del Quijote en coche nos lleva, de nuevo, hasta tierras de Ciudad Real. En esta ocasión, iniciaremos el recorrido en Argamasilla de Alba, a 50 kilómetros de El Toboso y 45 minutos conduciendo.
6. Argamasilla de Alba, Ossa de Montiel y Villanueva de los Infantes
Cuenta la leyenda que fue Argamasilla de Alba ese lugar “de cuyo nombre no quería acordarse” Cervantes al comenzar su novela. De hecho, allí encontramos la Casa Cueva Medrano, lugar en el que el escritor empezó su obra mientras se encontraba prisionero.
Otro de los puntos de interés para visitar es la Casa del Bachiller Carrasco, amigo de la familia de Don Quijote y que aparece en distintos pasajes.
La siguiente parada será en Ossa de Montiel, que se encuentra a 50 kilómetros de Argamasilla de Alba. En esta localidad, se sitúan muchas de las aventuras vividas por Don Quijote y su escudero. La más destacada la acaecida en la mágica cueva de Montesinos que, además, puedes visitar pidiendo una cita previa.
Tras recorrer otros 50 kilómetros más llegamos hasta Villanueva de los Infantes. Se trata de una de las poblaciones con mayores tesoros históricos de la provincia. En cuanto a su implicación con el universo cervantino, podríamos decir que aquí se sitúa la casa de Don Diego de Miranda, el que fuera el Caballero del Verde Gabán, referente de valentía para Don Quijote.
Si a todo ello sumamos que muy cerca encontramos el hermoso Parque Natural de las Lagunas del Ruidera, entonces tenemos una visita perfecta.
El siguiente destino nos lleva hasta Ciudad Real, poco más de 100 kilómetros que podemos recorrer en coche en 1 hora, aproximadamente.
7. Finalizamos con Ciudad Real y Almagro
Se trata de la última etapa de la Ruta del Quijote y sus pueblos. Además de visitar los importantes monumentos históricos que encontramos, como la Catedral de Santa María del Prado y la Puerta de Toledo, no debes perderte el Museo del Quijote. En esta ocasión, vamos a encontrar a los personajes hablando entre sí, lo que le imprime un carácter muy especial.
A menos de media hora en coche llegamos hasta Almagro. Se trata de un encantador municipio que te hará viajar en el tiempo, especialmente en aquella época en las que el teatro era el centro neurálgico de la vida cultural y social. Es imprescindible visitar su Plaza Mayor donde, además, encontramos un Corral de Comedias del siglo XVII, así como el Museo Nacional del Teatro.
Y aquí finaliza la Ruta del Quijote que te llevará a conocer no solo los secretos y datos que esconde esta inigualable obra de la literatura mundial, sino también disfrutar en primera persona los lugares en los que se inspiró Cervantes para crear una obra tan magistral. Una ruta llena de descubrimientos literarios pero, también, de sabrosos manjares gastronómicos.