La provincia de Ávila esconde lugares muy atractivos para el turismo. A solo una hora de coche de la capital de la provincia se encuentra un pequeño municipio de mucho interés para sus visitantes: El Barco de Ávila. Pese a sus menos de 3000 habitantes, su ubicación a las puertas de la Sierra de Gredos y su alto valor cultural hace del pueblo un lugar por el que debes parar en tu recorrido por la zona. De hecho, la villa está declarada como conjunto histórico-artístico. Vamos a conocer qué ver en El Barco de Ávila a nuestro paso. Recorre sus calles, disfruta de su gastronomía e imprégnate de su esencia.
¿Qué ver en El Barco de Ávila?
Una muralla medieval
Si tienes pensado ir a El Barco de Ávila, un buen punto de entrada para verlo es su muralla. Se construyó en la Edad Media, y en sus inicios rodeaba todo el pueblo de El Barco para protegerlo de la amenaza exterior. Entre otros aspectos se ha podido documentar la existencia de cuatro puertas, dos de ellas románicas. Un paseo por toda la construcción nos hará adentrarnos en la época medieval que todavía mantiene su esencia en la villa.
El Puente Viejo
El recorrido medieval no finaliza con la muralla. El Puente Viejo se construyó en la misma época y nos permite pasar por encima del Río Tormes, que atraviesa El Barco de Ávila y le confiere un encanto único. Con 125 metros de largo y origen romano, es un paso adecuado para adentrarse en otros lugares de interés del pueblo. El puente disponía de una torre de control, pero los franceses lo destruyeron a su paso por El Barco en la Guerra de Independencia. Sin duda, no dejes de caminar sobre el Puente Viejo para disfrutar de su belleza.
La Puerta del Ahorcado
A tu paso por la muralla no olvides pasar por este punto. La Puerta del Ahorcado, del siglo XVI, recibió este nombre tras el ahorcamiento de un alcalde impopular de la villa.
El Castillo de Valdecorneja
Otro punto imprescindible a tu paso por el Barco de Ávila es el conocido como Castillo de Valdecorneja. Lo encontrarás más alejado del casco antiguo actual, pero es un punto muy interesante en El Barco de Ávila qué ver. Datado en el siglo XII se encuentra entre el río y la montaña, en el punto más elevado del valle. Su planta cuadrada y una superficie de 1700 metros cuadrados lo hacen imponente.
Lógicamente, desde el castillo se pueden ver las mejores vistas de la zona y con una perspectiva única. Pese a haber sufrido daños importantes a lo largo de la historia, el castillo se encuentra en buen estado gracias a las diversas restauraciones que se han hecho. La ubicación del castillo también es relevante, pues allí se produjo la primera incursión humana del pueblo, en la época celta. Si quieres visitar la construcción podrás hacerlo en días y horarios concretos que podrás conocer en la Oficina de Turismo de El Barco de Ávila.
La Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora
Siguiendo el recorrido cultural y artístico de El Barco de Ávila nos encontraremos con la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora. Con su origen en el siglo XII y una reforma importante en el siglo XIV, cuenta con un alto valor histórico por su construcción y todas las obras de arte que podemos ver en su interior. Dispone de la iglesia, con tres naves, y una torre de estilo románico.
Capilla de San Pedro
Si quieres saber qué ver en El Barco de Ávila, no puede faltar la Capilla de San Pedro. Tocando a la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora y al cementerio del pueblo encontraremos esta capilla del siglo XVII. Cuenta con un retablo del mismo siglo o esculturas de San Pedro del Barco, San Pedro de Alcántara y un obispo.
Ermita del Santísimo Cristo del Caño
Otro punto de interés cultural es la conocida como Ermita del Cristo. En ese punto cuenta la tradición que apareció junto al puente un Cristo de madera en el siglo XIII.
Una mezquita en El Barco de Ávila
Aunque puede sonar extraño, la realidad es que si conocemos la historia de las civilizaciones que pasaron por El Barco de Ávila entenderemos por qué perviven los restos de una antigua mezquita. Después de la invasión romana fueron los árabes los que se hicieron con el dominio de la zona y construyeron una mezquita para reunirse y rezar. Ahora, cuando pases por delante, podrás ver una charcutería.
La Casa del Reloj
Si avanzamos por la calle mayor en dirección a la plaza Mayor del pueblo nos encontraremos con la Casa del Reloj. Se trata de una bonita construcción del siglo XV con un reloj muy característico en su fachada y una campana en lo alto de la construcción. El reloj funciona y su maquinaria está en el interior del edificio, que es habitual sede de exposiciones y punto desde el que se hace el pregón de las fiestas patronales.
Antigua Cárcel
En el número 33 de la calle mayor te toparás con la antigua cárcel del pueblo, construida en el siglo XVII y que es un elemento imprescindible que ver en El Barco de Ávila. Allí estuvieron los presos de la zona durante un tiempo, y después se trasladaron al Castillo, con mucho más espacio.
La plaza Mayor
El propio recorrido por las calles de El Barco de Ávila es muy agradable. Si seguimos uno de los recorridos recomendados para visitar la villa, desde la Iglesia y pasando por la Ermita de San Pedro, seguiremos hasta llegar a la plaza Mayor, un punto de parada obligatoria. Allí puedes tomarte algo antes de seguir tu camino. Como también lo fue en el pasado, la plaza es un lugar de encuentro de los habitantes del Barco, el lugar de la celebración del mercado semanal y de las principales celebraciones del año.
Las judías, un valor gastronómico
En El Barco de Ávila también podrás disfrutar de una muy buena gastronomía. Entre todos los platos populares de la zona, sin duda el más destacado son las judías, con denominación de origen protegida. Las conocidas como judías de El Barco de Ávila son alubias secas blancas y comparten características del frijol y de la habichuela. Las más conocidas son los judiones, aunque cuentan con otras variedades muy ricas.
Si bien se pueden cocinar de muchas maneras, la receta tradicional lleva aceite, ajo, sal, cebolla, pimentón, chorizo, panceta, oreja o rabo de cerdo. Lo mejor que puedes hacer es comprarlas en alguna tienda del pueblo o, aún mejor, probarlas en uno de sus bares o restaurantes y conocer la receta de primera mano. También debes saber que, dada su importancia, en El Barco puedes visitar el Museo de la Judía. Además de las judías, en la gastronomía de la zona podrás disfrutar de asados, guisos, legumbres, hortalizas o del fantástico chuletón de Ávila.
Ahora ya sabes con más detalle qué ver en El Barco de Ávila. Como has observado, hay muchos lugares de interés para ver en este pequeño pueblo que se encuentra a 1027 de altura sobre el nivel del mar y que dispone de unas fantásticas vistas de la Sierra de Gredos. Su alto valor histórico y la cercanía a un entorno natural maravilloso hacen que una estancia allí sea siempre un gran acierto.