¿Cuáles son los mejores balnearios en España?
Acudir a un balneario a disfrutar de aguas termales y tratamientos de relax no es algo novedoso: ya en la antigua Grecia y en el Imperio Romano hombres y mujeres disfrutaban de estas prácticas que se han ido perfeccionando a lo largo de los años.
Sin lugar a duda, ahora es un momento perfecto para disfrutar del amplio catálogo de balnearios en España. Estos espacios han mejorado notablemente sus instalaciones y servicios y se han convertido en lugares muy atractivos para una escapada de fin de semana.
Con pareja, con amigos, en familia o en la más absoluta libertad… Los mejores balnearios de España ofrecen opciones para todos los gustos y perfiles de viajeros. ¿Cuáles son los que hay que tener en cuenta si se quiere disfrutar de unos días de cuidados y relajación extrema?
Balneario de Archena: un paraíso en la Región de Murcia
Uno de los atractivos turísticos más importantes de la Región de Murcia es el Balneario de Archena, situado en un manantial de aguas termales en una zona montañosa, este espacio se ha convertido en uno de los planes de retiro más demandados de todo el país.
Estas instalaciones están situadas en un municipio llamado Archena, al que se llega desde la ciudad de Murcia en apenas unos 20 minutos de trayecto en coche.
Lo que encuentra el viajero que busca la relajación aquí es un gran centro con distintos hoteles de alta categoría, buenos restaurantes y un buen puñado de planes en torno a la salud, los masajes y el disfrute del agua caliente.
El origen de este lugar data del siglo V a.C. y de hecho, en un paseo por las diferentes galerías y edificios de las modernas instalaciones se pueden ver algunos de los restos arqueológicos que se conservan en la zona.
Desde entonces, este lugar ha ido evolucionando muchísimo, sobre todo a partir del siglo XX, hasta convertirse en lo que es hoy: uno de los balnearios de lujo en España.
Tres hoteles, de tres y cuatro estrellas, un espacio termal con más de 200.000 metros cuadrados de piscinas, un gran catálogo de masajes y tratamientos para la salud interior y exterior y una zona de piscinas más abierta para disfrutar de una jornada de turismo saludable son los principales atractivos que presenta esta primera propuesta.
Tratamientos y precios
Los precios para disfrutar del balneario de Archena son muy variados, dependiendo del plan que tengas.
Lo más económico es la zona de Spa Piscinas Termales: este lugar da acceso a piscinas con distintos chorros y circuitos de masajes, todos basados en la fuerza del agua. Es la zona más popular del balneario y suele estar llena de parejas, grupos de amigos y familias. El precio general es de 21 euros en temporada alta.
Una zona más privada es el Circuito Termal Balnea, que ya da acceso a otro tipo de piscinas más centradas en el cuidado físico, como baños turcos e incluso saunas. Se puede acceder por unos 30 euros.
Por último, está la posibilidad de sumar algún tratamiento de masajes o de belleza. En estos casos, el abanico de precios es mucho algo más alto, ya que parten desde los 70 euros.
El Balneario de Archena cuenta con promociones y packs combinados que incluyen revisiones médicas, terapias asistidas, alojamiento e incluso dietas específicas para el tiempo que se esté allí que varían cada temporada y se pueden consultar en su página web.
Castilla Termal Olmedo: aguas buenas en un ambiente morisco
Castilla Termal Olmedo es un hotel de lujo situado a las afueras de la localidad vallisoletana de la que toma prestado el nombre. Su lema es “Oasis de bienestar” y verdaderamente eso es lo que parece.
Un hospedaje de cuatro estrellas con poco más de 80 habitaciones de gran comodidad esconde, en sus plantas inferiores, un Spa, una piscina termal, un bellísimo patio mudéjar en un exquisito restaurante gastronómico de cocina de mercado.
Considerado como uno de los balnearios con encanto en España más destacados, llama la atención por su decoración, basada en el arte mudéjar, que permite que los usuarios se sientan como en uno de los baños de la Alhambra.
Ideal para parejas que busquen desconectar de todo, el Castilla Termal Olmedo podría, perfectamente, ser calificado como el mejor balneario de España.
Tratamientos más destacados
Los tratamientos del Balneario de Olmedo se basan en las propiedades mineromedicinales del agua de la zona, que nutren sus innovadoras instalaciones, combinadas con el conocimiento aplicado de sus profesionales en fisioterapia, masajes relajantes y tratamientos de salud.
El abanico de posibilidades es muy completo. Se puede simplemente entrar a la piscina termal, que incluso cuenta con horario establecido para niños, y que da acceso a una serie de piscinas con chorros, jacuzzis, etc.
Sin embargo, la mayoría de los visitantes optan por una experiencia como la del Patio Mudéjar, que supone disfrutar de un recorrido guiado por distintos chorros, espacios húmedos, secos y fríos en grupos de entre dos y seis personas… Toda una experiencia.
Otros tratamientos son los masajes relajantes, rituales hindúes para renovar la piel o incluso tratamientos de belleza en pareja.
Por último, este balneario cuenta con paquetes cerrados que ofrecen una experiencia integral en las instalaciones con programas que van desde los dos a los catorce días.
En cuanto a los precios, la reserva de una habitación doble en agosto para un fin de semana de relax para dos personas cuesta en torno a 230 euros, con desayuno y acceso a la piscina termal incluidos.
Los tratamientos especiales, como los masajes, parten de precios en torno a los 70 euros, aunque dependerá de la elección que el coste sea más alto o reducido.
Balneario del Gran Hotel La Toja: conexión con el mar
Clásico de los clásicos, el Balneario del Gran Hotel La Toja está considerado como uno de esos sitios que hay que probar, sí o sí, al menos una vez en la vida.
No se puede pedir más lujo, comodidad y detalle a la orilla del mar que en este hotel situado en Pontevedra y que ha evolucionado el concepto clásico de los balnearios marinos en España.
Se trata de un hospedaje de cinco estrellas al que la mayor parte de la gente acude por su precioso balneario y club termal, dos servicios cuyas instalaciones conviven perfectamente con el entorno natural en el que está ubicado el edificio.
¿Qué mejor sensación que estar a remojo en unas aguas sanadoras frente a un gran ventanal que ofrece las mejores vistas del mar? ¿Y si encima se trata de una ‘isla’ en plena Ría de Arousa? Esto es lo que los amantes de los balnearios en España pueden encontrar en La Toja.
Por sus características, son sobre todo grupos de adultos sin niños los que aprovechan de manera habitual estas instalaciones. Sin embargo, cada vez son más las personas que se plantean pasar un fin de semana de relax en un balneario y en los últimos años los grupos de amigos de entre 30 y 50 años también están dándose el capricho de reservar.
Los planes más interesantes de La Toja
Las piscinas termales son de uso común tanto para personas alojadas como para quienes vienen de fuera. Los primeros tienen una tarifa reducida de 25 euros (12 euros los niños), mientras que los no alojados tienen que pagar hasta 40 euros (20 euros hasta los 12 años).
Pero lo verdaderamente interesante de este balneario son los extraordinarios lodos, sales y algas con las que llevan a cabo los tratamientos específicos.
Peelings, masajes localizados, baños mineromedicinales, aromaterapia y sesiones de envoltura corporal con algas son algunas de las propuestas más populares de este espacio, que presenta precios que parten desde los 25 euros.
En la mayoría de casos, el club termal, que abre de nueve de la mañana a ocho y media de la tarde, se aprovecha mejor con tratamientos combinados que incluyen varias acciones y que incluso se pueden disfrutar en pareja con un coste aproximado de 240 euros.
A esto se puede sumar la reserva de una habitación en el complejo. Para dos personas en pleno mes de agosto, el fin de semana puede estar por debajo de los 900 euros para una habitación normal.
Balneario de Panticosa: sorpresa en la montaña
Viajamos de la orilla del mar a la alta montaña para conocer otro de los mejores balnearios de España: Panticosa.
Este espacio abre sus puertas en plena estación de esquí, así que las sensaciones que ofrece al visitante son muy distintas, ya que principalmente está pensado para ofrecer un contraste de actividades a quienes suben a la zona de montaña de Huesca a practicar deportes de invierno.
Situado a tan solo ocho kilómetros de la estación de Panticosa y a veinte de la popular Formigal, este balneario es único en España por permitir que sus huéspedes convivan con picos nevados y temperaturas bajo cero en un espacio a 1.636 metros de altitud que parece de postal de cuento nórdico
Compuesto por tres edificios (dos hoteles con zona de aguas termales y el Balneario Termas de Tiberio), la zona ha sido utilizada con espacio termal precisamente desde la época del emperador romano que da nombre a los baños.
Llama la atención por el poder de sus aguas, que brotan de la tierra a una temperatura de 53 °C y están dotadas de unas características minerales que las hacen perfectas para tratamientos sanadores y del cuidado físico.
¿Qué instalaciones elegir?
Cualquiera de las tres zonas de baño de Panticosa es interesante, pero quizá las Termas de Tiberio sean las que más público atraen. Se trata de un lugar diseñado para sentirse en verdadera comunión con la naturaleza, el agua y la luz natural.
Con una zona de cabinas para los tratamientos y otra de baños con piscina exterior incluida, el acceso al circuito termal tiene un coste de tan solo 36 euros.
Los tratamientos tipo masaje relajante con aromas suelen tener unos costes situados en torno a los 80 euros.
El espacio, la variedad de su oferta y el lugar en el que está situado lo convierte en un plan perfecto para quienes no se pierden su cita anual con la nieve y quieren dedicar un tiempo a un plan todavía más especial cuidando su cuerpo y su mente tras unos días de ejercicio físico intenso.
Balneario de Vichy Calatán: un clásico con reconocimiento mundial
Todo el mundo conoce las aguas de Vichy Catalán, que se comercializan para el consumo humano en España. Pero también se puede disfrutar de las mismas a través del famoso balneario con el mismo nombre que levantó sus muros en esta zona de Girona en 1881.
Para llegar a este maravilloso enclave hay que desplazarse hasta la localidad de Caldes de Malavella. Allí, una preciosa portada en forma de castillo da la bienvenida a los viajeros que buscan un remanso de paz para su cuerpo y para su mente.
Dentro, un hotel con menos de un centenar de habitaciones, un restaurante dirigido por el chef David Heras y una zona de Spa termal y Centro Welness completamente pensados para satisfacer al visitante.
Con un ambiente familiar para personas de todas las edades que buscan relajación, el Balneario de Vichy Catalán ofrece unas aguas en sintonía con la temperatura corporal, masajes y rituales, tratamientos de todo tipo y completos programas wellness para cuidarse como nunca.
Lo más interesante es que su circuito termal también tiene una parte dedicada a los niños, para que estos puedan disfrutar libremente sin importunar a parejas o grupos de adultos que quieren gozar en paz de su descanso.
Un programa de tratamientos asequible
Ducha masaje, ducha escocesa, envoltura con algas, exfoliación con distintos elementos naturales… son muchos los programas de cuidados de Vichy Catalán cuyo precio está por debajo de los 70 euros.
Esto hace que esté considerado como uno de los balnearios de lujo en España más valorados por los usuarios, que vuelven un año tras otro para cargar las pilas en estas instalaciones.
De todas las opciones que tiene este centenario lugar, conviene destacar los programas wellness, que unen tratamientos, circuitos termales y gastronomía para que quienes los disfrutan sientan que verdaderamente se cuidan tanto por dentro como por fuera.
Estos son solo cinco de los muchos balnearios en España que estos años están viviendo una nueva edad de oro con cada vez más gente interesada en ellos. Y es que pocas personas se resisten a este tipo de actividades en las que cada uno se convierte en el centro de todo y solo tiene que olvidar el reloj y dejarse cuidar por unas aguas que lo sanan todo.